Antes de que un cielo de fuel se desplome sobre nosotros,
antes de que las dudas nos vuelvan locos,
antes de que los pájaros nos ataquen,
antes de que nuestros cerebros se trastornen.
Amémonos
sin ese orgullo que vuelve loco
hasta al más amable de nosotros.
Amémonos
por las primaveras que nos precedieron,
por los niños que nos sucederán.
Antes de que los árboles sean contagiosos
y de que bajo el mármol se apaguen tus ojos,
antes de que el día de hoy nos deprima,
antes de que el día de mañana nos diezme.
Amémonos
sin ese orgullo que vuelve loco
hasta al más amable de nosotros.
Amémonos
por las primaveras que nos precedieron,
por los niños que nos sucederán.
Hoy para mañana,
preparemos el jardín
para todos los humanos,
compartamos los placeres
y el pan y el vino.
Antes de que la luna se pierda de vista
y de que bajo Neptuno se inunden las calles,
antes de que la guerra se enfade,
antes de que la paz se traslade.
Amémonos
sin ese orgullo que vuelve loco
hasta al más amable de nosotros.
Amémonos
por las primaveras que nos precedieron,
por los niños que nos sucederán.
Amémonos,
amémonos,
amémonos,
amémonos.