¿Ven a ese criollo rodear,
rodear, rodear...?
Los paisanos le dicen
«mi General».
Va alumbrando con su voz,
la oscuridad...
Y hasta las piedras saben,
adonde va.
«Con libertad, no ofendo ni temo».
¡Qué don José!...
Oriental en la vida
y en la muerte también.
¿Ven a los indios formar
el escuadrón
y aprontar los morenos,
el corazón?
Y de fogón en fogón
se oye la voz:
«¡Si la patria me llama,
aquí estoy yo!»