No dejes que tu cabeza se canse
ni se confunda, que tu voluntad se paralice, no lo intentes.
No dejes que tu corazón se vuelva estricto,
niño, en tu interior hay una fuerza que subyace.
No dejes que tu espíritu se vuelva solitario,
niño, es sólo cuestión de tiempo, pasará.
No busques amor en caras, lugares,
es en ti donde encontrarás amabilidad.
Quédate aquí ahora, quédate aquí ahora,
Quédate, quédate aquí ahora, quédate aquí ahora.
No pierdas tu fe en mí
e intentaré no perderla en ti.
No confíes en las paredes
porque las paredes únicamente te aplastarán cuando caigan.
Quédate, quédate aquí ahora, quédate aquí ahora.
Quédate, quédate aquí ahora, quédate aquí ahora.