Me sentenciaron a veinte años de aburrimiento
por intentar cambiar el sistema desde dentro.
Vengo ahora, vengo para recompensarles.
Primero tomamos Manhattan, después tomamos Berlín.
Me guía una señal de los cielos.
Me guía esta marca de nacimiento en mi piel.
Me guía el futuro de nuestras armas.
Primero tomamos Manhattan, después tomamos Berlín.
De verdad que me gustaría vivir junto a tí, nena.
Amo tu cuerpo y tu espíritu y tus ropas.
¿Pero ves aquella línea moviéndose a través de la estación?
Te lo dije, te lo dije, te lo dije, ¡Yo era uno de esos!
No me gusta su negocio de moda, señor.
Y no me gustan esas drogas que le mantienen delgado.
No me gusta lo que le ocurrió a mi hermana.
Primero tomamos Manhattan, después tomamos Berlín.