Si es tu voluntad
que no hable más
y que mi voz caiga en el silencio
en el que antes estaba,
no volveré a hablar.
Obedeceré hasta
que intercedan por mi,
si es tu voluntad.
Si es tu voluntad,
que una voz se alce, sincera
desde esta colina rota,
te cantaré
desde esta colina rota,
y mis alabanzas resonarán,
si es tu voluntad
permitirme cantar
desde esta colina rota.
Mis alabanzas resonarán
si es tu voluntad
permitirme cantar.
Si es tu voluntad,
si hay elección,
que los ríos se llenen,
que las colinas festejen,
que tu misericordia se extienda
sobre todos esos corazones ardientes en el infierno.
Si es tu voluntad
curarnos.
Y atraernos a ti
y atarnos con fuerza.
Todos tus niños aquí
en sus harapos hechos de luz,
en nuestros harapos hechos de luz,
todos vestidos para matar
y acabar con esta noche
si es tu voluntad.
Si es tu voluntad.