Iré a tu boda
con una chaqueta equivocada
y en los ojos el demonio.
Una botella de vino blanco en mano,
con la cara cansada de un hombre borracho.
Patearé las sillas, golpearé el aire.
Dos bofetadas al padre, un beso al esposo.
Y te haré llorar.
A tu boda,
con la corbata desatada
y una baraja.
Y un bastón de selfies en mano.
Haz una pose que tomo la foto.
Empujaré a los padres, diré cosas indecentes.
Un saludo afectuoso a todos los presentes.
A los amigos de mucho tiempo.
A tu boda.
Quisiera saber cómo estás.
Te amo y te odio.
En las malas o en las buenas,
podríamos huir juntos.
Según yo, te conviene.
Despósame, despósame aunque te haya hecho llorar.
Despósame, despósame aunque te haya hecho llorar.
A tu boda,
el carro prendido afuera,
la calle en bajada.
Una caricia a tu madre, vámonos
aunque a dónde no lo sepamos.
Podríamos irnos de compras,
Navidad en un crucero, llévame a la luna
si esta es la vida que siempre soñaste.
A tu boda.
Quisiera saber cómo estás.
Te amo y te odio.
En las malas o en las buenas,
podríamos huir juntos.
Según yo, te conviene.
Despósame, despósame aunque te haya hecho llorar.
Despósame, despósame aunque te haya hecho llorar.
Porque debería ser yo quien besara a la esposa.
(A tu boda...)
Pero he jurado amor a la vida frente a Dios.
(A tu boda...)
Y no será una promesa la que me ate a ti.
En las malas o en las buenas.
Si ya no estaremos juntos
ha sido un verdadero placer.
(Despósame, despósame aunque...)
(Despósame, despósame aunque...)
Iré a tu boda.
Iré a tu boda.
Iré, sí, iré.
Iré a tu boda.