Setecientas cartas por abrir.
Un millón de fotos por esconder.
Todo el equipaje, un triste fin
y cuatro paredes lloran por mí.
Tan desconcertada al no sufrir
mil pedazos de mi corazón.
Rosenvinge canta y me hace sentir
que hasta el perro hoy preguntó por ti, por ti
Hoy quisiera pensar que existe un consuelo
que aplaque este miedo a la soledad, a la soledad.
Hoy quisiera pensar que aún tengo el remedio,
las ganas y un credo para continuar, para continuar.
Qué le voy a hacer si no dolió
esta historia universal de amor.
Si Deluxe la canta me hará sentir
que hasta las galletas saben a ti.
Hoy quisiera pensar que existe un consuelo
Que aplaque este miedo a la soledad, a la soledad
Hoy quisiera pensar que aún tengo el remedio,
las ganas y un credo para continuar, para continuar.
Esta vez tampoco hará falta un juez
no hay reclamaciones en papel
Si tú estás conforme, mejor así.
Sigue tu camino, el mío está aquí
El mío está aquí, aquí, aquí...
Setecientas cartas por abrir.