Hasta donde el ojo alcanza
solo se ven pantanos y tierras baldías.
No nos anima el canto de los pájaros.
Los robles están deshojados y torcidos.
Somos los soldados del pantano,
y marchamos con nuestras palas
en el pantano.
Aquí en estas tierras yermas
han construido un campo de concentración,
donde nos han apresado, tras alambrados,
lejos de toda felicidad.
Somos los soldados del pantano,
y marchamos con nuestras palas
en el pantano.
En la mañana marchan las columnas
a trabajar en el pantano.
Cavan bajo el ardiente sol,
pero solo piensan en su hogar.
Somos los soldados del pantano,
y marchamos con nuestras palas
en el pantano.
Todos añoran ir a casa
con sus padres, mujeres e hijos.
Algunos dan un fuerte suspiro,
porque estamos encerrados.
Somos los soldados del pantano,
y marchamos con nuestras palas
en el pantano.
Por todos lados están los guardias.
Nadie, nadie puede pasar.
Huir cuesta la vida,
Cuatro hileras de cercas tiene la fortaleza.
Somos los soldados del pantano,
y marchamos con nuestras palas
en el pantano.
Pero no hemos de lamentarnos,
no puede ser por siempre invierno.
Algún día diremos felizmente:
"Patria, eres mía de nuevo"
Entonces los soldados del pantano
no marcharan más con sus palas
en el pantano