¿Para qué yo vivo,
por qué no muero?
Para seguir sufriendo,
la muerte quiero.
Cuentan que aquel día
que al mundo llegué
mi madre dio un suspiro,
me besó y se fue.
Mi canción es pena,
mi verso es dolor
mi voz un lamento,
castigo de Dios.
De amarguras llevo
el alma llena,
pa’ mí no hay día alegre
ni noche buena
Estrella del cielo,
¿por qué me mirás?
Dime, ¿te causa pena
de verme llorar?
La noche está clara
igual que el día,
brillan como nunca
las Tres Marías
Para el desengaño
nadie es como yo,
duro como piedra
tengo el corazón
De amarguras llevo
el alma llena,
pa’ mí no hay día alegre
ni noche buena
Mi canto es pena
Mi verso es dolor
Mi voz un lamento,
castigo de Dios
De amarguras llevo
el alma llena,
pa’ mí no hay día alegre
ni noche buena